Enfermedades gastrointestinales: guía básica para entenderlas

Editorial Farmatodo.

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Las enfermedades gastrointestinales hacen referencia a los trastornos que afectan al aparato digestivo o tracto gastrointestinal, el cual comprende: estómago, esófago, hígado, páncreas, vesícula biliar y los intestinos grueso y delgado. Suelen ser generadas por virus, bacterias y parásitos, en algunas ocasiones también pueden ser provocadas por alimentos o como efecto secundario de algunos medicamentos.

Este tipo de enfermedades son bastante comunes y son una de las razones más frecuentes por las que se consulta con los proveedores de salud. En este artículo encontrarás un abrebocas para tratar de entenderlas.

Entre las enfermedades gastrointestinales más frecuentes están:

Gastroenteritis vírica o viral

Esta infección, que afecta principalmente el intestino grueso, es ocasionada por la acción de un virus, y genera en el paciente dolor y/o calambres abdominales, diarrea, náuseas, vómito y, en algunos casos, altas temperaturas corporales.

Por cuenta de esta afección, que es conocida comúnmente como la gripe del estómago, los virus atacan las células sanas del cuerpo y estas dejan de funcionar normalmente. La gastroenteritis viral es contagiosa y, aunque pude llegar a ocasionar deshidratación, no es considerada una afección grave, de hecho, no suele durar más de una semana.

Si bien cualquier persona es susceptible de contraer gastroenteritis viral, los más propensos a padecerla son los niños menores de 10 años, los adultos mayores, y quienes tienen un sistema inmune poco fortalecido.

Esofagitis

Esta afección es la inflamación del esófago: conducto mediante el cual los alimentos llegan al estómago después de ser consumidos. Ciertas alergias, algunos medicamentos, la ingesta frecuente de alimentos muy condimentados, el reflujo gástrico y algunas infecciones, podrían generar la inflamación del esófago.

La esofagitis ocasiona un fuerte dolor en el pecho y hace que tragar resulte complejo y cause dolor. A las personas con este trastorno se les recomienda llevar dietas blandas mientras la inflamación se reduce.

Esta afección no es grave, pero precisa tratamiento médico. Si el paciente no recibe la atención adecuada, la esofagitis podría causar otras complicaciones como daños en los tejidos que protegen el esófago, estrechamiento del conducto, deshidratación y pérdida de peso como resultado de evitar comer para no sentir dolor.

Gastritis

Se refiere a la inflamación del revestimiento estomacal. La gastritis puede ser causada por la mala administración de ciertos medicamentos, por el consumo exagerado de bebidas alcohólicas, por la acción de la bacteria helicobacter pylori, que causa una infección en el estómago, y por otras causas menos comunes.

Los síntomas de la gastritis incluyen dolor abdominal, inapetencia, vómito y náuseas; si la afección es más grave, pueden presentarse heces fecales con sangre y un color poco común.

Diarrea

A la evacuación de materia fecal líquida o muy suelta más de tres veces al día, se le conoce como diarrea. Esta afección puede presentarse por diferentes causas, pero principalmente por consecuencia del consumo de alimentos sucios, en descomposición o afectados por alguna bacteria.

La diarrea puede durar como máximo tres días, si persiste por más tiempo será necesario consultar con el proveedor de salud para tratar de encontrar las causas que la están generando. Si no se trata a tiempo, la diarrea puede ocasionar deshidratación severa.

Síndrome de colon o intestino irritable

Esta afección afecta el intestino grueso generando cólicos abdominales, inflamación y cambios en los hábitos del intestino: diarrea o estreñimiento. El síndrome de colon irritable no produce daños en el intestino, pero genera molestias que afectan la calidad de vida; es más común en las mujeres que en los hombres y se puede tratar identificando los alimentos que generan una respuesta negativa.

Intolerancia a la lactosa

Se cree que un porcentaje cercano al 50% de la población mundial vive con intolerancia a la lactosa. Este trastorno se produce cuando el intestino delgado no genera suficientes niveles de lactasa, la enzima responsable de descomponer la lactosa; el resultado es que la persona no puede digerir completamente la lactosa que ingiere, la cual llega al intestino grueso: creando gases y fluidos para tratar de descomponerla.

La intolerancia a la lactosa no es una alergia a la lactosa, sino la incapacidad del organismo de procesarla apropiadamente. Dolores estomacales, gases y diarrea son frecuentemente ocasionados por cuenta de este trastorno gastrointestinal.

Acidez gástrica

Este trastorno genera una sensación de molestia descrita como ardor, en lo que en el argot popular se conoce como la boca del estómago, y que en realidad corresponde al esófago. El dolor, sin embargo, puede sentirse desde el estómago, pasando por el pecho, el cuello y la garganta.

La acidez gástrica generalmente se produce por la devolución hacia el esófago de los ácidos estomacales o de alimentos parcialmente digeridos, los cuales afectan el esófago causándole irritación.

Prácticas que pueden ser causantes de enfermedades gastrointestinales

• Ingerir alimentos contaminados.

• Comer sin haberse lavado las manos previamente.

• Utilizar el baño y no lavarse las manos después.

• No lavar o desinfectar los alimentos antes de procesarlos: frutas, verduras, carnes y demás.

• Beber agua sucia o contaminada, aunque parezca limpia.

• El consumo exagerado de ciertos medicamentos de venta libre.

Síntomas frecuentes de enfermedades gastrointestinales

Si bien cada trastorno presenta sintomatología diferente, entre los síntomas comunes que pueden llegar a denotar la presencia de este tipo de padecimientos se encuentran:

• Dolores en el tracto digestivo que se evidencian desde la garganta hasta la parte baja del abdomen.

• Inapetencia.

• Reflujo.

• Acidez estomacal.

• Deposiciones irregulares.

• Orina irregular.

• Regurgitación.

• Vómitos, orina y/o heces con sangre.

• Náuseas frecuentes.

• Vómito.

• Dificultades para tragar.

Cómo se tratan las enfermedades gastrointestinales

Cada una de las enfermedades gastrointestinales precisa de diagnóstico y tratamiento especializado, por eso es importante que ante la aparición de cualquier sintomatología que pudiera denotar alguno de estos trastornos, consultes con tu proveedor de salud.

Una vez valorada la situación, tu médico identificará la mejor manera de abordar tu afección. Algunos de los procedimientos que se aplican más frecuentemente para tratar las enfermedades gastrointestinales incluyen modificaciones en los hábitos alimenticios y en las rutinas o el estilo de vida de la persona afectada, el uso de suplementos dietarios y compuestos farmacológicos, medicamentos antiácidos, antibióticos y analgésicos, entre otros. En algunas circunstancias más graves quizás sea necesario acudir a intervenciones quirúrgicas.

Probablemente, no hay una manera de evitar padecer una enfermedad gastrointestinal, pero tener hábitos de vida saludable, así como evitar las prácticas que pueden causar este tipo de trastornos son buenas estrategias de prevención.

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Disclaimer
La información contenida en este blog es revisada por médicos especialistas con la finalidad de brindar un soporte únicamente informativo. Te aconsejamos consultar con tu médico profesional de confianza en caso de presentar cualquier síntoma o querer iniciar o suspender algún tratamiento acorde a las condiciones médicas. Los tópicos contemplados en este contenido no se destinan a tratamientos o diagnósticos. Recomendamos nunca automedicarse y no nos hacemos responsables por la manera en como utilice esta información.

Preguntas Frecuentes


¿Qué examen se hace para detectar enfermedades gastrointestinales?

El especialista médico determinará las pruebas que debes practicarte con base en tu sintomatología. Algunas pruebas comunes son: análisis de sangre, de orina o de materia fecal, endoscopias, y exámenes por imágenes.

¿Las enfermedades gastrointestinales son graves?

Toda afección sobre tu salud, por mínima que sea, puede llegar a convertirse en un trastorno delicado si no se le brinda la atención que precisa. Inicialmente las enfermedades gastrointestinales son tan comunes que no resultan graves problemas, sin embargo, se recomienda que no descuides tu cuerpo y que consultes con tu médico antes de que trascienda a un problema mayor.

¿Cuándo es necesaria una intervención quirúrgica?

Tu médico gastroenterólogo puede llegar a optar por la cirugía (planeada o de emergencia) cuando el padecimiento ha llegado a niveles que afectan la calidad de tu salud, y además representa una amenaza para la vida.