Guía para usar maquillaje en piel con acné

Editorial Farmatodo.

Saber maquillarse adecuadamente cuando se tiene acné es importante por varias razones. En primer lugar, el maquillaje puede ayudar a cubrir temporalmente las imperfecciones causadas por el acné, lo que puede aumentar la confianza y mejorar el estado de ánimo. Sin embargo, es crucial utilizar productos no comedogénicos y no irritantes para evitar empeorar el acné. Además, aprender técnicas de maquillaje adecuadas puede ayudar a minimizar la apariencia del acné sin agravar la condición, permitiendo así que la piel respire y se recupere. También es esencial practicar una buena higiene facial, como limpiar el rostro antes y después de maquillarse, para prevenir obstrucciones adicionales de los poros y mantener la salud de la piel a largo plazo.

Es crucial recordar que el maquillaje no debe ser una solución permanente ni un sustituto para el cuidado adecuado de la piel. Por lo tanto, es fundamental complementar el uso de maquillaje con una rutina de cuidado de la piel específicamente diseñada para tratar el acné, que incluya limpieza, exfoliación y aplicación de productos adecuados para controlar la producción de sebo y reducir la inflamación. Al aprender a maquillarse de manera apropiada y consciente, se puede lograr un equilibrio entre cubrir las imperfecciones y cuidar la salud de la piel, lo que contribuye a una mejor autoestima y bienestar emocional a largo plazo.

A continuación, te explicaremos con detalle cómo debe ser la preparación para maquillarte si tienes una piel con acné:

Preparación de la piel:

• Comienza limpiando tu rostro con un limpiador suave diseñado para pieles propensas al acné. Evita los limpiadores que contienen ingredientes irritantes como el alcohol.
• Aplica un tónico suave para equilibrar el pH de tu piel y prepararla para el maquillaje.
• Usa una crema hidratante libre de aceite y no comedogénica para mantener la piel hidratada sin obstruir los poros.

Primer:

• Antes de aplicar el maquillaje, aplica un Primer diseñado para pieles propensas al acné. Este paso ayudará a crear una base suave y uniforme para el maquillaje, además de ayudar a controlar el exceso de brillo y minimizar la apariencia de los poros.

Corrector:

• Usa un corrector de color verde para neutralizar el enrojecimiento causado por el acné. Aplica el corrector verde directamente sobre las zonas rojas y difumina suavemente con las yemas de los dedos o una esponja de maquillaje.
• Luego, aplica un corrector del color de tu piel sobre el corrector verde para ocultar el enrojecimiento. Asegúrate de difuminar correctamente para lograr un aspecto natural.

Base de maquillaje:

• Elige una base de maquillaje ligera o de cobertura media que sea no comedogénica y libre de aceite. Aplica la base con una brocha, esponja o tus dedos, asegurándote de difuminarla uniformemente sobre toda la cara.
• Evita aplicar capas gruesas de base, ya que esto puede obstruir los poros y empeorar el acné.

Polvos translúcidos:

• Utiliza polvos translúcidos para fijar el maquillaje y reducir el brillo de tu rostro. Aplica una capa ligera sobre toda la cara con una brocha grande y suave.

Maquillaje de ojos y labios:

• Opta por productos no comedogénicos y libres de aceite para el maquillaje de ojos y labios. Evita los productos que contienen ingredientes irritantes.
• Siempre limpia tus brochas y aplicadores de maquillaje regularmente para evitar la acumulación de bacterias que pueden empeorar el acné.

Desmaquillado:

• Al final del día, asegúrate de eliminar completamente el maquillaje con un limpiador suave. Nunca te vayas a la cama con maquillaje, ya que puede obstruir los poros y empeorar el acné.

Al seguir estos pasos y utilizar productos adecuados para el cuidado de la piel y el maquillaje, puedes preparar tu piel de manera óptima para lucir un maquillaje impecable sin agravar el acné. En el momento de elegir productos de maquillaje, asegúrate de seleccionar fórmulas no comedogénicas que no obstruyan los poros ni empeoren el acné. Busca etiquetas que indiquen "oil-free" y evita los productos a base de aceite, que pueden contribuir a la obstrucción de los poros.

Además de seguir una rutina de cuidado de la piel específicamente diseñada para tratar el acné, al maquillarte es importante tener en cuenta algunos consejos adicionales para asegurarte de que tu piel se vea radiante y en óptimo estado de salud:

Higiene adecuada:

• Procura lavar tu rostro dos veces al día con un limpiador suave y que sea específico para pieles con acné. Evita frotar la piel con demasiada fuerza, ya que esto puede irritarla y empeorar el acné.
• Usa agua tibia para lavar tu rostro y luego sécalo suavemente con una toalla limpia, evitando frotar.

Tratamientos tópicos:

• Incorpora tratamientos tópicos recomendados por tu dermatólogo, como peróxido de benzoilo, ácido salicílico o ácido glicólico, en tu rutina de cuidado de la piel.
• Aplica estos tratamientos después de limpiar y tonificar la piel, antes de aplicar el maquillaje. Sigue las instrucciones de tu dermatólogo para su uso adecuado.

Hidratación adecuada:

• Aunque puedas tener la piel grasa debido al acné, es importante hidratarla adecuadamente. Usa una crema hidratante libre de aceite y no comedogénica después de aplicar cualquier tratamiento tópico y antes del maquillaje.
• Opta por productos etiquetados como "oil-free" o "libres de aceite" para evitar obstruir los poros.

Protector solar diario:

• El uso de protector solar es fundamental para proteger la piel del daño causado por el sol y prevenir la hiperpigmentación posterior al acné. Elige un protector solar oil-free y no comedogénico con un SPF de al menos 30 y aplícalo cada mañana, incluso en días nublados.

Estilo de vida saludable:

• Mantén una dieta equilibrada rica en frutas, verduras, proteínas magras y granos enteros. Evita los alimentos procesados, grasosos y azucarados que pueden empeorar el acné.
• Practica técnicas de manejo del estrés, como la meditación, el yoga o el ejercicio regular, ya que el estrés puede desencadenar brotes de acné.
• Evita tocarte la cara con las manos sucias para prevenir la transferencia de bacterias y la obstrucción de los poros.

Al seguir estos consejos y una rutina de cuidado de la piel adecuada, puedes ayudar a minimizar el acné y lograr un acabado de maquillaje hermoso y natural. Recuerda siempre que es importante consultar a un dermatólogo para obtener recomendaciones personalizadas según las necesidades de tu piel.